Avanzado el año se regularizan los pagos y ahora es cuando empezar a ahorrar. Incluso los muy endeudados deben hacerlo.
- La meta es ahorrar un 10% de los ingresos netos, pero olvídelo. El objetivo inicial es tener siempre en la cuenta bancaria un saldo a favor y creciente. ¡Es mito el que ahorrar poco sea inútil!l ya se sabe que tener dinero para el taxi en medio de la noche, o no tenerlo es muy distinto.
- También es distinto deber en la tarjeta ¢400.000 o ¢2 millones. Siempre menos es más y cuando se trata de deudas esa verdad se quintuplica, porque se tardaría cinco veces más pagando la primera que la segunda deuda y eso es a cálculos simples cerca de 20 meses más de vida de deudor. ¡Pagar también es ahorrar!.
- Hay que pagar y aumentar el saldo de la cuenta de ahorro a la vez. Suponga que usted tiene una deuda en una tarjeta por ¢500.000 a una tasa de 45% anual (que es lo que cobran en promedio las tarjetas en este país) pero, se dispone a seguir el siguiente PLAN (palabra destacada): 1. Destinará ¢50.000 quincenales para el pago. 2. Guardará ¢5.000 bisemanales en su cuenta.
En seis meses habrá cancelado la deuda y tendrá una cuenta de ahorro con unos ¢60.000 adentro ¡más intereses!. Logrará atacar dos frentes y al final del periodo tendrá ¢50.000 más para gastos y siempre dinero para el taxi.
Una vez cancelada la deuda podría destinar la cuota del pago al ahorro y como resultado en seis meses más tendría una cuenta con ¢680.000. Ya para entonces usted jamás se volvería a preocupar por el taxi, y estaría en capacidad de invertir en dos o tres certíficados a plazo o en un fondo de inversión.
En un año usted sería una persona distinta, más tranquila y más feliz. Inicie su plan de pago y de ahorro, y tome en cuenta que pueden pasar cosas que le impidan cumplir los tiempos (tuvo que pagar un taxi extra). Siga, si no es en seis meses será en siete pero SEGUIR evitará que el plazo se extienda por toda su vida. ¡Sonría vamos por el camino correcto!.
Publicado en Blog 1+1=3 de El Financiero